Los supervivientes disputaban por grupos la semifinal de la prueba de líder. Los concursantes debían entrar en el mar y nadar lo más rápido posible para conseguir una de las boyas que les daría el pase a la final.
Oto y Fabio se convertían en semifinalistas del grupo de los Abandonados y Albert y Omar, del gupo de Los Señores.
Además, el programa les hacía un regalo como recompensa: ¡Una ducha de agua dulce con champú y suavizante!