'Peligro de accidente' en Callejeros

'Peligro de accidente' en Callejeroscincomas.com

Tráfico prevé que se produzcan 80 millones de desplazamientos en el arranque de las vacaciones de Semana Santa. Gran parte de estos viajes se realizarán por carreteras convencionales. En estos trazados, un anteproyecto de modificación del Reglamento de Circulación de la Dirección General de Tráfico, contempla rebajar la velocidad de 100 km/h a entre 90 y 50km/h en función de las características de la vía.

En cambio, se permitirá alcanzar los 130 km/h en algunos tramos de autopistas y autovías. Unas medidas polémicas para organizaciones de conductores y asociaciones de víctimas de accidente. “No somos pilotos, somos conductores”, señala Jeanne Picard, portavoz de Stop Accidentes.

A lo largo de 2012 perdieron la vida 1.166 personas en unas carreteras que acumulan más de 800 puntos negros. En unos de estos tramos, en la Nacional 2 de Zaragoza, la Guardia Civil detecta a varios conductores que duplican el límite establecido: “es más peligroso ir a la velocidad establecida”, señala uno de los infractores.

Galicia es la comunidad con más tramos de concentración de accidentes en su red viaria. La nacional 547, en Arzúa, “tiene una de las tasas de mayor siniestralidad de toda Europa”. En los últimos meses han fallecido 6 personas en más de 60 accidentes, “el pueblo ha estado de luto” comenta Josefa de Protección Civil.

La tragedia y el luto también han llegado a Ronda. Un conductor se llevó por delante a dos ciclistas que circulaban por el arcén de la A-384. Amigos de los fallecidos indicaban que “el conductor también superaba la tasa de alcoholemia”.

Por eso, los reporteros están presentes en un control de alcoholemia. “No estamos locos” afirma uno de los miles de jóvenes que se divierten en el parking de una conocida discoteca de Fraga, en Huesca. Minutos después este mismo joven es cazado por la Guardia Civil con una tasa de alcohol de 0,49. Junto a él, 5 jóvenes dan positivo en drogas.

La combinación de alcohol y velocidad y no llevar puesto el cinturón de seguridad cambiaron la vida de Javier. “Rompí la luna con mi cabeza y desperté días después tetrapléjico” Ahora se recupera de las secuelas entrenando perros que ayudan a personas como él.